El libro lleva por título Lacan con los filósofos y ciertamente cómo se desarrolla en sus páginas la impronta de la filosofía en la obra de Lacan se hace notar mucho más que en la de Freud. […] Debemos recordar que Lacan vinculó a la filosofía con el discurso del amo que es también el del inconsciente, y el psicoanálisis lo supone, al ser él su revés. Si en la obra de Freud abundan las referencias clínicas, los historiales, los sueños de sus pacientes y los propios, ello no abunda de igual manera en la obra de Lacan, donde toman relevancia los textos filosóficos. Considero que el psicoanalista francés no solo aprende de ellos, sino que también los toma como textos clínicos y los analiza. Este libro expone la fuerza que ha tenido la filosofía en la enseñanza de Lacan y aquí vale recordar, como ejemplo entre otros, el lugar predominante del diálogo el Parménides de Platón. […] Si para hablar del amor Lacan eligió El banquete, para referirse al Uno privilegiará el Parménides. Hay dialéctica en El banquete, hay falta, hay Eros ligado a la unión mientras que hay existencia en el Parménides, hay Uno, hay abandono de la dialéctica en su faz ascendente, pero si recuperación de la dialéctica descendente, como la que separa y distingue. Distintos momentos que operan cual bisagras emparentan a Lacan con Platón. El lector encontrará de qué modo el libro hace honor a su título. Del Prólogo de Silvia Ons