ENVÍOS SIN COSTOS A TODO EL PAÍS EN COMPRAS WEB SUPERIORES A $60.000
Desde que sus libros comenzaron a circular en la Europa del siglo XVI, Nicolás Maquiavelo (1469-1527) fue controvertido y censurado. Se lo asoció con la validación de las conductas más abyectas, con los fenómenos más repudiables, del crimen a la tiranía, de la hipocresía a la violencia. Maquiavelo fue quien dijo lo indecible y, a la vez, quien enseñó la necesidad de la mentira y del engaño; un autor de la franqueza sin eufemismos y un maestro de la simulación. Por esas razones, pudo considerárselo tanto un cómplice del poder como un amigo de la libertad. Si sus consejos al príncipe podían ser un "manual para los tiranos", la exposición sin tapujos de esos mismos consejos permitía alertar a los pueblos contra los gobiernos arbitrarios. Su nombre trascendió ampliamente las fronteras del conocimiento erudito y especializado, se convirtió en sustantivo o en un adjetivo para calificar actitudes y conductas, en el sentido común y en el lenguaje coloquial. A pesar de todo ello, y de que Maquiavelo es objeto de atención permanente entre académicos y especialistas, poco se sabe de cómo fue leído en nuestro país.

MAQUIAVELO EN LA ARGENTINA - LOSADA LEANDRO

$8.500
Sin stock
MAQUIAVELO EN LA ARGENTINA - LOSADA LEANDRO $8.500
Compra protegida
Tus datos cuidados durante toda la compra.
Cambios y devoluciones
Si no te gusta, podés cambiarlo por otro o devolverlo.
Desde que sus libros comenzaron a circular en la Europa del siglo XVI, Nicolás Maquiavelo (1469-1527) fue controvertido y censurado. Se lo asoció con la validación de las conductas más abyectas, con los fenómenos más repudiables, del crimen a la tiranía, de la hipocresía a la violencia. Maquiavelo fue quien dijo lo indecible y, a la vez, quien enseñó la necesidad de la mentira y del engaño; un autor de la franqueza sin eufemismos y un maestro de la simulación. Por esas razones, pudo considerárselo tanto un cómplice del poder como un amigo de la libertad. Si sus consejos al príncipe podían ser un "manual para los tiranos", la exposición sin tapujos de esos mismos consejos permitía alertar a los pueblos contra los gobiernos arbitrarios. Su nombre trascendió ampliamente las fronteras del conocimiento erudito y especializado, se convirtió en sustantivo o en un adjetivo para calificar actitudes y conductas, en el sentido común y en el lenguaje coloquial. A pesar de todo ello, y de que Maquiavelo es objeto de atención permanente entre académicos y especialistas, poco se sabe de cómo fue leído en nuestro país.