Dice Atilio Borón que esta obra propone una mirada amplia sobre la historia y el presente de la educación superior no sólo argentina sino también latinoamericana. Uno de los méritos de este libro es que desmiente, con datos muy precisos y contundentes, supuestos tales como el carácter “injusto” de la gratuidad universitaria o una supuesta “invasión académica” de estudiantes latinoamericanos a las universidades argentinas. En este escenario queda muy claro, como decía José Martí, que “trincheras de ideas valen más que trincheras de piedras”.